Etapa de carretera, siguiendo la N.120.
De camino a Sahagün pasas cerca de Moratinos, sin llegar a entrar en él, atravesando después San Nicolás del Real Camino. A un par de kilómetros de este pueblo, encuentras la primera sorpresa de la etapa: la Ermita de la Virgen del Puente a la que se llega después de atravesar el río Valderaduey por un hermoso puente medieval. Tiene una estupenda área de descanso.
Poco queda ya para entrar en Sahagún . Lo primero que se entrevé, a lo lejos, es la torre de la Iglesia de San Tirso, una joya del románico “pobre”, como llaman al estilo románico mudejar por estar construido en barro. Merece la pena entrar y ver el ábside de ladrillo con sus arcos de herradura.
En el camino atravesamos el Arco de San Benito, que da paso al Convento de las Benedictinas que guarda los restos de Alfonso VI.
Sahagún y sus monumentos dan la impresión de necesitar un arreglo urgente. El caos urbanístico oculta la mayoría de ellos con un estado de abandono evidente.
Se sale de Sahagún atravesando el río Cea por el Puente Canto o "de Piedra". A 5 kilómetros, en Calzada del Coto, hay que elegir entre la ruta que va a Calzadilla de Hermanillos –llamada Vía Trajana– y la que se dirige a Bercianos del Real Camino. La ausencia de hostales y de casas rurales en Calzadilla, me hizo decidirme por la de Bercianos. Este recorrido forma parte del llamado “Real Camino Francés” preparado exclusivamente para los peregrinos (bancos, fuentes, sombra y zonas de descanso).
Camino Real Francés. Hacia Bercianos |
Son 7 km. cómodos –casi demasiado– los que se recorren desde Calzada del Coto hasta Bercianos, nuestro final de etapa.
Bercianos del Camino:"Este pequeño pueblo de poco más de 200 habitantes que los peregrinos atraviesan en una rápida transición”... (así lo describe uno de los innumerables blogs del Camino), tiene –sin embargo– albergue de peregrinos y un pequeño hotel llamado Hostal Rivero, bueno para descansar sin más comentarios. También ofrece menú del día.
La tarde me la pasé buscando la antigua iglesia del pueblo –que ya no existe– y pintando uno de sus palomares.
Estupenda luz la de aquel momento.
Estupenda luz la de aquel momento.
No hay comentarios :
Publicar un comentario