A la salida de O,Cadavo un mojón bien señalizado nos desvía a la izquierda. Por asfalto, entreviendo campos y colinas boscosas a través de la niebla, se llega a Pradeda, pequeña aldea en la Serra de Baqueriza con algunos caserones de piedra dignos de mirada.
(ETAPA ANTERIOR: CAMINO PRIMITIVO: De Fonsagrada a O'Cadavo)
Atravesé Pradeda y seguí subiendo hasta el Alto da Baqueriza (interesantes los dos cipreses entre la niebla). Cruzamos la LU-530 y avanzamos de frente por camino de tierra. Es en este punto donde debemos estar atentos para poder coger el desvío a Vilabade, catalogado ahora como "Camino complementario" y que solo es medio kilómetro más largo que el oficial. No darse cuenta supone no ver la Iglesia de Vilavade a la que llaman "la Catedral de Castroverde".
Yo carecía de información y, a pesar de estar bien señalizado con un cartel informativo, desheché el desvío. (https://elpais.com/diario/2010/01/05/galicia/1262690302_850215.html)
Continúe hacia Vilalle.
Yo carecía de información y, a pesar de estar bien señalizado con un cartel informativo, desheché el desvío. (https://elpais.com/diario/2010/01/05/galicia/1262690302_850215.html)
Continúe hacia Vilalle.
Caminando entre bosques y pastos con vacas, por caminos de tierra perfectamente señalizados y en una bajada que sería continua hasta Lugo, llegamos a Castroverde. Pasamos antes junto al Albergue de Peregrinos que se encuentra al lado de un enorme tronco de castaño cortado: El Castiñeiro de Soutomerille.
El Camino seguía de frente, después de cruzar la carretera, pero yo continué por la Avenida Rosalía de Castro, que así se le llama en Castroverde a este tramo de la LU-530. Te das de bruces con el Bar O,Camiño donde se puede tomar un estupendo desayuno.
Yo quería ver el Castelo de Castroverde. El camino que sube hasta él se encuentra al lado de este bar. Merece la pena perder unos minutos de tiempo para sentarse a la sombra de los castaños y nogales que lo rodean.
Antes de salir de Castroverde me esperaba otra sorpresa: su iglesia y la joven encargada de informar a los peregrinos. Hay que ver lo que se puede hacer con ganas... me contó la historia de Castroverde, de los lugares del Camino por los que no había pasado ni iba a pasar (Vilavade y el bosque de Soutomerille), me dió mapas de la zona y no me quiso cobrar ni la voluntad. Espero que siga ahí.
Salimos de Castroverde por la Rua da Fonte, llamada así por la Fuente de la Virtud, que nos vamos a encontrar en medio de una tranquila y coqueta área de descanso. Continúa el camino por bosques y congostas hasta que, después de cruzar 3 arroyos (el mayor de ellos es el Río Chamoso, afluente del Miño), llegamos a Souto de Torres, que nos recibe con su Cruceiro y la Iglesia de Santo Tomé.
En Nadela pasamos por otro hermoso crucero y continúamos hacia Vilar de Cas. Abandonamos este pueblo por carretera y la seguimos hasta llegar a un cruce: el Camino oficial sigue a la derecha, pero –si nos fijamos bien- al lado del mojón hay un letrero de madera que nos ofrece la posibilidad de desviarnos del camino oficial y visitar, tras 800 m. de sendero, las Ruinas de Soutomerille. Contienen los restos de un templo prerrománico dedicado a San Salvador, la Casa-Fuerte de Monfortiño y el Castiñeiro de Corredoira. Además sale de él uno de los senderos más deslumbrantes de Lugo https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/soutomerille-07-may-14-6798564
Después de visitar las ruinas, no hay que desandar la ruta. Se engancha con ella siguiendo la vereda.
Yo no vi el desvío (y eso que me habían avisado en Castroverde). Voy a tener que volver.
Crucero de Nadela |
Siguiendo la carretera vemos una laguna en lo que parece una propiedad privada. Un cartel informa que nos encontramos en A Pallota, en Paderne. Continuando por carretera, entre campos, cruzamos el Rego de Romean entrando con él en el término municipal de Lugo. Caminamos por la LU-P-2917 donde un cartel nos informa de que estamos en la parroquia de Gondar.
Un poco después de atravesar esta aldea sale, a la izquierda de la carretera, un desvío -no muy bien marcado- por el que, en poco menos de 2 km. y a través de un amplio sendero boscoso, alcanzamos la aldea de Romean. Aquí estaba el final de mi etapa: el Albergue La Rectoral. Había reservado una habitación independiente en la piso bajo por 30 €. (en la casona, el albergue se encuentra arriba). La comida en el jardín, sencilla y bien preparada, fue estupenda (12 €).
El enclave apenas cuenta con una veintena de casas y la Iglesia-cementerio, pero es un lugar con historia. Las imponentes casonas con tejados a cuatro aguas y rodeadas de muros de piedra, nos hablan de un pasado próspero cuando por aquí pasaba no solo el Camino de Santiago, sino también el de Los Bestilleiros rumbo a la Feria de Adai.
Por la tarde caminé un buen trecho hacia esta localidad por la LP-U-1602, construida sobre este Camino de los Bestilleiros y me encontre con la Cruz que marca el camino hacia Adai y que, según la leyenda, se levantó en memoria de una mujer devorada allí por un lobo.
Crucero en el camino a Adai |
Iglesia parroquial de San Pedro en Romean |
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